CONSEJOS DE SAN PABLO A LOS ENFERMOS
De joven fue a Jerusalén a especializarse en la Biblia como discípulo del sabio judío Gamaliel.
San Pablo se ha hecho famoso por sus cartas en las cuales enseña verdades valiosísimas acerca de nuestra fe. Allí se ve que era un verdadero convertido de Cristo y su Iglesia.
San Pablo fue un gran apóstol del sufrimiento, ya que vivió tiempos difíciles en la que sufrió verdaderas persecuciones y encarcelamientos.
- Estimo que los sufrimientos de la vida presente no se pueden comparar con la Gloria que nos espera y que se ha de manifestar. Rom 8,18
- ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Acaso las pruebas, la aflicción, la persecución, el hambre, la falta de todo, los peligros o la espada? Rom 8,35
- Dios ha elegido lo que es común y despreciado en este mundo, lo que es nada, para reducir a la nada lo que es. Y así ningún mortal podrá alabarse a si mismo ante Dios 1 Cor 1,28-29
- Por eso acepto con gusto lo que me toca sufrir por Cristo: enfermedades, humillaciones, necesidades, persecuciones y angustias. Pues si me siento débil, entonces es cuando soy fuerte. 2 Cor 12,10
- Y es una gracia para vosotros que no solamente hayan creído en Cristo, sino también que padezcan por Él. Flp 1,29
- Una cosa es cierta: si hemos muerto con Él, también viviremos con Él. Si sufrimos pacientemente con Él, también reinaremos con Él. Si lo negamos también Él nos negará. 2 Tim 2,11-12
- Por eso no nos desanimamos; al contrario, aunque nuestro exterior está decayendo, el hombre interior se va renovando de día en día en nosotros. No se pueden equiparar esas ligeras pruebas que pasan de prisa con el valor formidable de la gloria eterna que se nos está preparando. 2 Cor 4,16-17
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