¿ME AMAS MAS QUE A LOS OTROS?

Releamos la pregunta que Cristo le hizo a San Pedro, y si la respuesta es afirmativa, confirmarìa lo que nosotros tenemos que hacer, es decir que tambièn tenemos que apacentar a sus ovejas, porque da la casualidad que son las mismas ovejas que las de Cristo; y que hemos de hacer:

1. Cuidar y defender con todas nuestras fuerzas la vida de ese pequeño que està por nacer, y que pese a los consejos de algunos y a veces hasta de nuestra propia familia hemos decidido que esta ovejita vea la luz como una nueva vida.
2.  Educar cristianamente  con la palabra y el ejemplo a esa pequeñas ovejas que Dios ha puesto bajo nuestra responsabilidad en el hogar.
3. Velar especialmente por aquellos miembros de la familia que se encuentran enfermos o viven lejos del rebaño; medio abandonados por nosotros.
4. Buscar todas las formas posibles de ayudar a aquella oveja descarriada que conocemos y que vive una vida en soledad y amargura y orar por ella; a la vez oremos tambièn por la oveja negra de la familia, y dèmosle nuestra comprensiòn y ayuda.
5. Ayudar y prestar atenciòn a aquella señora que para un momento solicitando alimentos y preparando despensas para los pobres.
6. Acompañar y agradecer a la vez a aquellos estudiantes de Derecho que , sin cobrar un centavo asesoran y dan asistencia tècnica y legal a comunidades de escasos recursos.
7. Animar y acompañar a los mèdicos y enfermeras que prestan servicios gratuitos en alguna de nuestras clìnicas parroquiales.

A aquel que esto hiciere podrìa decirse que en verdad aman a Cristo y que le ayudan de alguna manera a apacentar sus ovejas.