SALVACIÓN POR FE Y NO POR OBRAS
Esta es una afirmación recurrente que hacen ciertas sectas protestantes, por no decir la mayoría; de que la salvación se logra solamente por creer en Jesucristo y el aceptarlo públicamente.
Esta concepción de ipsum fideum la han mantenido a través del tiempo desde que Martín Lutero, emitió sus tesis en la abadía de Wittemberg, su tesis de la salvación la fundamenta esencialmente en la sola scriptura, es decir que solo los escritos hagiográficos merecen la confianza para depositar en ellos nuestra fe. Deja por supuesto esta concepción a un lado el depòsito de la fe, mantenida en la Tradición Apostólica que se remonta hasta los tiempos de los apostoles. Es indudable que la Biblia en su conjunto recoge una gran cantidad de aspectos referidos a la Revelación Teológica, pero resulta ilógico pensar que toda la revelación esté contenida en la Biblia, pues como dijo el apóstol que fue testigo directo en la vida de Jesús: "Muchas otras cosas hizo Jesús que si se escribiesen una por una no podrían contenerse en todos los libros" Jn 21,25.
Por una simple y elemental lógica deberíamos pensar que si sólo lo hecho y dicho por Jesús fue bastante para ser contenida en el Nuevo Testamento, que no podría decirse del Antiguo Testamento que recoge los hechos desde los inicios de la tierra y el universo. Por tanto mantener la tesis de la sola scriptura en el aspecto de la revelación, es tener una limitada visión teológica y por ende una muy limitada visión de la SALVACION.
La SALVACIÓN, afirmo no puede estar contenida por la virtud de la Fe, pero entonces ¿Que es lo necesario para salvarse?; será FE y OBRAS, sólo obras o sólo fe. Analicemos: "Pues de gracia habéis sido salvados por la fé, y esto no os viene de vosotros, es don de Dios, no viene de las obras para que nadie se gloríe" Ef 2,8-9. edición Nacar Colunga.
En la versión Reina Valera se lee, sección b: " no por obras para que nadie se gloríe", se evidencia notablemente el énfasis en resaltar que las obras no son necesarias para la salvación, no obstante que en el siguiente versículo se lee: " que hechura somos creados en Cristo Jesús, para hacer buenas obras que Dios de antemano preparó; para que en ello anduviésemos" Ef 2-10.
En los escritos paulinos podemos encontrar muchas citas que nos hablan de las obras como requisito para salvarse y no sólo la Fe como han sostenido y mantienen las sectas, olvidándose de la terrible sentencia que se encuentra en el libro del apocalipsis de añadir o quitar palabras a la revelación. Para enfatizar las obras necesarias para la salvación, he aquí algunas, tomadas de las cartas de San Pablo.:
Rom 2,6 "le dará a cada uno según sus obras....
2 Cor 8,7 " obra de caridad........
2 Cor 9,8 " obra buena........
1 Tim 2,10 " con obras buenas......
1 Tim 5.25 " con obras manifiestas........
1 Tim 6,18 " haciendo buenas obras......
2 Tim 3,17 " toda obra buena......
Tito 3,1 " pronto a toda obra buena......
Todo el Nuevo Testamento, esta lleno de citas que nos hablan de las obras como necesarias para la salvación pues como dice el apóstol Santiago: Así también la fe, sino no tiene obras es de suyo muerta" Sant 2,17
Dentro de todo este contexto en el JUICIO FINAL, cuando ya esté todo consumado Jesucristo juzgará a la humanidad exclusivamente sólo por las obras en donde muchos responderán sorprendidos: " Señor ¿cuando te vimos hambriento y te alimentamos, sediento y te dimos de beber? ¿ cuando te vimos peregrino y te acogimos, desnudo y te vestimos? ¿ cuando te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte? Mt 25,37-39.
El juez justo responderá"que cuantas veces lo hicisteis a uno de mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis", e irán estos a la gloria de Dios, y lo mismo les dirá a los que no lo atendieron en sus hermanos, pero ahí la sentencia es terrible, pues él les dirá: " apartaos e mi, malditos, al fuego eterno, preparado para el diablo y sus angeles".
En este juicio Dios, cabe una distinción:
1-el que supo del evangelio y
2-el que nunca oyó la palabra ni podía guardarla pues nunca la conoció.
En este segundo grupo se encontrarán musulmanes, judíos, budistas, hinduistas, paganos etc. Aproximadamente la humanidad tiene unos seis mil millones de habitantes, de estos la mitad quizás, profesa alguna forma de cristianismo
la otra mitad siguen los otros credos religiosos además hay ateos. De este grupo puede pensarse que Dios juzgará a cada quien según hayan sido sus obras, pues no se les puede imputar si tuvieron fe o nó, pues nunca conocieron del evangelio, todo esto desde el principio de los tiempos.
En el primer grupo nadie podría tener disculpa si Dios nos condena pues tuvimos la revelación y no quisimos ni cumplirla ni seguirla. A ti querido hermano protestante te hago un llamado para que llegues a la razón, pues has sido engañado y continúas engañado: no basta como te han dicho que con ya tu estás salvo, esto es evangelismo fácil y sin compromiso, esta es una mentira que el demonio ha diseminado desde la reforma protestante hasta nuestros días, pues de los tales habla San Pablo "Alardean de conocer a Dios, pero con sus obras le niegan, abominables, rebeldes y descalificados para toda obra buena" Tito 1,16
"Seréis aborrecidos de todos por mi nombre; el que persevere hasta el fin, ese será salvo" Mt 10,22
"No todo el que dice: ¡Señor, Señor! entrará en el Reino de los Cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos" Mt 7,21
LAUS DEUS
Esta concepción de ipsum fideum la han mantenido a través del tiempo desde que Martín Lutero, emitió sus tesis en la abadía de Wittemberg, su tesis de la salvación la fundamenta esencialmente en la sola scriptura, es decir que solo los escritos hagiográficos merecen la confianza para depositar en ellos nuestra fe. Deja por supuesto esta concepción a un lado el depòsito de la fe, mantenida en la Tradición Apostólica que se remonta hasta los tiempos de los apostoles. Es indudable que la Biblia en su conjunto recoge una gran cantidad de aspectos referidos a la Revelación Teológica, pero resulta ilógico pensar que toda la revelación esté contenida en la Biblia, pues como dijo el apóstol que fue testigo directo en la vida de Jesús: "Muchas otras cosas hizo Jesús que si se escribiesen una por una no podrían contenerse en todos los libros" Jn 21,25.
Por una simple y elemental lógica deberíamos pensar que si sólo lo hecho y dicho por Jesús fue bastante para ser contenida en el Nuevo Testamento, que no podría decirse del Antiguo Testamento que recoge los hechos desde los inicios de la tierra y el universo. Por tanto mantener la tesis de la sola scriptura en el aspecto de la revelación, es tener una limitada visión teológica y por ende una muy limitada visión de la SALVACION.
La SALVACIÓN, afirmo no puede estar contenida por la virtud de la Fe, pero entonces ¿Que es lo necesario para salvarse?; será FE y OBRAS, sólo obras o sólo fe. Analicemos: "Pues de gracia habéis sido salvados por la fé, y esto no os viene de vosotros, es don de Dios, no viene de las obras para que nadie se gloríe" Ef 2,8-9. edición Nacar Colunga.
En la versión Reina Valera se lee, sección b: " no por obras para que nadie se gloríe", se evidencia notablemente el énfasis en resaltar que las obras no son necesarias para la salvación, no obstante que en el siguiente versículo se lee: " que hechura somos creados en Cristo Jesús, para hacer buenas obras que Dios de antemano preparó; para que en ello anduviésemos" Ef 2-10.
En los escritos paulinos podemos encontrar muchas citas que nos hablan de las obras como requisito para salvarse y no sólo la Fe como han sostenido y mantienen las sectas, olvidándose de la terrible sentencia que se encuentra en el libro del apocalipsis de añadir o quitar palabras a la revelación. Para enfatizar las obras necesarias para la salvación, he aquí algunas, tomadas de las cartas de San Pablo.:
Rom 2,6 "le dará a cada uno según sus obras....
2 Cor 8,7 " obra de caridad........
2 Cor 9,8 " obra buena........
1 Tim 2,10 " con obras buenas......
1 Tim 5.25 " con obras manifiestas........
1 Tim 6,18 " haciendo buenas obras......
2 Tim 3,17 " toda obra buena......
Tito 3,1 " pronto a toda obra buena......
Todo el Nuevo Testamento, esta lleno de citas que nos hablan de las obras como necesarias para la salvación pues como dice el apóstol Santiago: Así también la fe, sino no tiene obras es de suyo muerta" Sant 2,17
Dentro de todo este contexto en el JUICIO FINAL, cuando ya esté todo consumado Jesucristo juzgará a la humanidad exclusivamente sólo por las obras en donde muchos responderán sorprendidos: " Señor ¿cuando te vimos hambriento y te alimentamos, sediento y te dimos de beber? ¿ cuando te vimos peregrino y te acogimos, desnudo y te vestimos? ¿ cuando te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte? Mt 25,37-39.
El juez justo responderá"que cuantas veces lo hicisteis a uno de mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis", e irán estos a la gloria de Dios, y lo mismo les dirá a los que no lo atendieron en sus hermanos, pero ahí la sentencia es terrible, pues él les dirá: " apartaos e mi, malditos, al fuego eterno, preparado para el diablo y sus angeles".
En este juicio Dios, cabe una distinción:
1-el que supo del evangelio y
2-el que nunca oyó la palabra ni podía guardarla pues nunca la conoció.
En este segundo grupo se encontrarán musulmanes, judíos, budistas, hinduistas, paganos etc. Aproximadamente la humanidad tiene unos seis mil millones de habitantes, de estos la mitad quizás, profesa alguna forma de cristianismo
la otra mitad siguen los otros credos religiosos además hay ateos. De este grupo puede pensarse que Dios juzgará a cada quien según hayan sido sus obras, pues no se les puede imputar si tuvieron fe o nó, pues nunca conocieron del evangelio, todo esto desde el principio de los tiempos.
En el primer grupo nadie podría tener disculpa si Dios nos condena pues tuvimos la revelación y no quisimos ni cumplirla ni seguirla. A ti querido hermano protestante te hago un llamado para que llegues a la razón, pues has sido engañado y continúas engañado: no basta como te han dicho que con
"Seréis aborrecidos de todos por mi nombre; el que persevere hasta el fin, ese será salvo" Mt 10,22
"No todo el que dice: ¡Señor, Señor! entrará en el Reino de los Cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos" Mt 7,21
LAUS DEUS
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